Crónica de una acompañante.

¡¡¡ Oíd guerreros la llamada de vuestro Clan!!!

Empezaré diciendo que soy nueva en esto, pero me han planteado un reto y lo he aceptado: escribir una crónica desde el punto de vista de los acompañantes a las carreras.

En solo tres carreras me doy cuenta de la ilusión que poneis en lo que haceis. Correis porque podeis, quereis y porque la pasión mueve cada paso que dais a través de las montañas.

Y en tan solo tres carreras me doy cuenta de lo importante que son las personas y personitas que os acompañan en vuestro viaje y siempre están cuando llegais a la meta.

Como acompañante he podido vivir la libertad de plantar las casitas en los lugares más insólitos, he convivido con vosotros los guerreros, vuestras estrategias, vuestras familias, la emoción y los nervios previos a la salida, vuestros cuerpos cansados al llegar a la meta y vuestras mentes satisfechas. Mientras corréis, nosotras charlamos en torno a unas cervezas, cuidamos y jugamos con nuestros pequeños, paseamos, recogemos el campamento, leemos esperando que crucéis la meta, ¿quien será el primero, que habrá pasado ahí arriba, como lo habréis vivido?
Y cuando parece que todo acaba, realmente es el principio de la segunda parte. Cuando llegais a la meta y habeis acabado la batalla nosotras escuchamos pacientemente lo que habeis vivido durante esas intensas horas, los ríos que habeis cruzado, lo técnico de los terrenos que habeis pisado, un perro que daba miedo, una plantilla rota, una subida dura, la emoción de ir adelantando puestos, una caída de la que os levantáis con rabia, la próxima carrera...intentamos imaginar lo que contais para que la pasión sea más compartida.

Pero claro, solo llevo tres carreras... habría que preguntar a las veteranas.




Raquel Koraku